Esta enfermedad prevenible es progresiva y no tiene cura y cuando inicia no se detiene. Las personas afectadas desarrollan dificultad respiratoria durante la actividad, que a veces progresa a dificultad respiratoria en reposo.
Flores explicó que la lectura de la placa OIT para silicosis se la hace desde hace varios años, siendo la primera autorización el año 2000, luego en 2011 y las placas digitales desde 2022.
La falta de profesionales y equipos técnicos es otro factor que impide dar cobertura a todos los trabajadores mineros y a quienes son susceptibles a contraer la silicosis por el tipo de labor que realizan. Bolivia solo cuenta con 60 especialistas.
Una niña de siete años que estuvo en la ciudad de El Alto, La Paz, presentó fiebre y erupciones; sus padres pensaron que se podría tratar de dengue y la llevaron al hospital, pero las pruebas de laboratorio confirmaron que se trata de sarampión.
Este municipio del norte paceño cuenta con centros de salud, que son de primer nivel y un hospital municipal que atiende incluso a otros municipios aledaño. Gente gravemente herida debe ser trasladada a la ciudad de La Paz.
La falta de fármacos, insumos, equipos e infraestructuras será evaluada por la Comisión de Política Social, Educación y Salud, de la Cámara de Senadores, con una serie de visitas a hospitales, a propósito de los cinco años del SUS.